En estos días en los que todos tenemos a París en mente, me gustaría enseñarte un rincón de la ciudad que pocos turistas conocen y que se aleja del bullicioso centro parisino. Un lugar donde poder relajarse.

El Bois de Vincennes es el espacio verde más grande de París, con unas 995 hectáreas llenas de vida y lugares para visitar. Se encuentra al este, en el pueblo de Vincennes pero actual distrito 12 de la capital y fue el bosque de caza privada de la realeza.

Pese a que está algo alejado del centro, si buscas tranquilidad y descansar después de un largo día de turismo, te recomiendo acercarte a este bosque. No solo encontrarás una gran biodiversidad entre lagos y jardines tropicales, sino que este oasis urbano está lleno de secretos y libre de humos, pues tienes 32 km de caminos cerrados a los vehículos.

La joya principal es el Château de Vincennes, el mayor castillo fortificado real del país y está en muy buena conservación. Lo que más destaca, la Torre del Homenaje.

Este símbolo del despotismo real francés está parcialmente abierto al público. Puedes consultar el horario y el precio de la entrada en la web oficial.

Pero el Bois de Vincennes guarda otros rincones e incluso un zoológico. El Zoo de París, recién remodelado y convertido en uno de los mejores de Europa con 1200 animales en aparente libertad, está abierto todo el año, desde las 10 hasta las 18:00h. entre semana y hasta las 19:30h. los fines de semana. El precio de una entrada para adulto es de 22€ pero tienes más tarifas en su página web.

Con la compañía de los cuatro lagos que hay repartidos por todo el bosque también puedes encontrarte un hipódromo, un templo budista que se esconde en el lago Daumesnil y hasta la Cartoucherie, un recinto teatral con cinco pequeños teatros: du Soleil, de la Tempête, de l’Epée de Bois, de l’Aquarium y L’atelier de Paris-Carolyn Carlson. Puedes comprar los tiquets en la puerta principal o por Internet y una hora antes de cada espectáculo, cada 15 minutos sale un viejo autobús escolar desde la estación de metro de Château de Vincennes que te acerca gratis a la puerta de la Cartoucherie.

Estos son algunos de los secretos del Bois de Vincennes pero no quiero desvelarte todos. Lo mejor es que lo visites la próxima vez que vayas a París y descubras todos sus rincones, que lo recorras andando o en bici, te des un paseo en barca y alquiles una tumbona en uno de sus lagos para descansar el resto del día.

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Para llegar a este magnífico bosque utiliza la línea 8 del metro y bájate en la estación Liberté si quieres entrar por la parte suroeste. La parada Château de Vincennes de la línea 1 te deja al lado del castillo,en la zona norte, y desde allí sale el bus que te lleva a los teatros.

Aquí tienes un plano del Bois de Vincennes: